Si tengo oportunidad lo veré de nuevo. Todo perfecto. La música y la narración junto con el cante y el baile fue increíble. Un espectáculo lleno de sensibilidad y fuerza.

Velada muy agradable con Agustín Barajas y su compañía Mucho trabajo tanto de los músicos como de las bailarinas con dedicación a Lorca

Extraordinario, viva la cultura ❤️

El conjunto es muy calidoscópico y paradójico, como lo era Federico García Lorca, como lo es el mismo flamenco, o el arte en general. Momentos de intensidad y dramatismo, y momentos de alegría y de fluidez. Agustín Barajas baila con precisión de virtuoso pero con intuición libre, explorando, sin aspavientos pero con valentía, todos los recodos expresivos que se abren cuando suena una guitarra o un piano o un acordeón y la voz rota rompe el silencio. Como a los personajes de Lorca, a Agustín se le vieron los huesos y la sangre, en cada baile y en cada enfoque se vaciaba hasta bailar ya con la esencia solo, y volvía a reponerse y a derrochar su energía en una entrega sucesiva que conseguía implicar al público. La voz rota de los cantaores compensó algunos problemas con las letras de los poemas de Lorca. El baile del mantón fue precioso y atrevido. Así que merece la pena volver a sumergirse en esta tierra de Federico de mano de un bailaor que lo comprende, al poeta, y que se vuelca y se da, delicado e intenso a la vez.